La idea de no estar solos en el cosmos nos persigue

Grandes rastreadores buscan incansablemente la conexión y el encuentro. 

 

Últimamente con el telescopio Kepler se detectaron tres mil seiscientos sesenta y ocho cuerpos planetarios. La Agencia Espacial Europea planea lanzar nuevos telescopios destinados a la búsqueda de eclipses y planetas en tránsito llamados habitables, con océanos similares a la Tierra. El agua líquida, tal y como lo conocemos desde nuestro planeta, es esencial para la vida.

Para el año 2026, se espera poner en órbita una nueva nave espacial europea denominada “Plato”, mucho más potente que los telescopios actuales en los cuales está cifrado nuestro anhelo de visualizar vida.

Cada día nos acercamos más a la conexión de un planeta civilizado que gire alrededor de una estrella similar al sol.  Difícil, pero no imposible. Mucho más dificultoso es cumplir el  ancestral deseo de la inmortalidad del hombre. Dos tareas pendientes indescifrables.